En octubre de 2009 se creó el programa de Asignaciones Universales por Hijo (AUH). A un año de su implementación, las AUH se han consolidado como un derecho que integra la seguridad social, y como tal se encuentra protegido por las disposiciones de los instrumentos internacionales de derechos humanos y los organismos encargados de su supervisión.
En este capítulo se realiza un balance sobre el impacto de las AUH y se busca reforzar el debate para garantizar su consolidación. Se da cuenta de los efectos sociales y económicos de la medida, se plantean los desafíos aún pendientes para asegurar la inclusión de grupos que todavía no forman parte de esta política social y se analizan los efectos producidos por las condicionalidades del programa en materia de educación y salud.
Finalmente, se afirma la necesidad de que el programa fortalezca su institucionalidad democrática a través de una ley aprobada por el Congreso nacional.
